No escribía en el blog hace tanto, que me agarró un atracón. Quizás, para evitar la voracidad, debería hacer como con la comida: sí o sí algo chiquitito cada dos horas. Lo que pasa es que no se me ocurren cosas a esa velocidad.
Claramente, mi relación con la escritura no va a ser ordenada como aconsejaría un buen nutricionista.
Me gusta eso.
¡Qué felicidad! Volviste!!! Hace días que espero para leerte, uff, ya está, me calmé. Gracias por tu atracón!!!
ResponderEliminarAh!! Y además te extraño a vos.